La propuesta quiere preservar el patio actual y sus visuales, considerando importante respetar el patrimonio a la vegada que se quiere lograr el objetivo de hacer accesible el nivel del actual sótano de la Casa Lluvià. Se trate de proyectar dos vacíos y provocar un pliego al pavimento, permitiendo abrir el sótano en la ciudad, al aire y a la luz.
El primer vacío a la fachada de la valla enmarca y muestra el acceso, consiguiendo la visibilidad de la sala desde la calle. El segundo vacío, en este caso vertical, permite la apertura del sótano en el vértice de la sala, mediante un patio interior ofreciendo iluminación y ventilación a la sala que hasta ahora era sepultada.
Longitudinalmente a la valla de la calle Cardenal Lluch, el pavimento del patio hace un pliego provocando una rendija que abre el subsuelo al exterior y a la vegada facilita una grada en el patio por las actividades exteriores.
Esta propuesta permite la ampliación, el acceso y la visibilidad de la sala en la calle con una idea clara y con carácter, respetando, manteniendo y mejorando el patio existente y la Casa Lluvià.